martes, 6 de marzo de 2012

Elogio de la dificultad


Elogio de la dificultad
Estanislao Zuleta (1935- 1990
Deducción…
Debido a la aceleración de los tiempos que nuestra misma cultura provoca, el hombre del siglo XXI no puede ya perder sus instantes en "inventar" cosas nuevas, por ende, nos hacemos siempre   a la idea de que debemos "hacer" todas las cosas nuevas y desde un principio, y así, desde hace tiempo, venimos  tratando de forjar un Ideal que nos  ayude a sobrevivir. No es lo mismo tener una Idea que tener un Ideal. Ideas tenemos, y  muchas, nuestras y prestadas, buenas y malas, pero ninguna de ellas va más allá de nuestra esfera intelectual, pues en cuanto trascienden el mundo de los pensamientos, en cuanto se hacen realidad por la fuerza de la voluntad, entonces ya se trata de un Ideal. Un Ideal  que es una forma de vida, una constante puesta en práctica de aquellas ideas que satisfacen nuestra mente.
Para poder vivir un Ideal, tenemos que concebir aquellos Arquetipos o "viejos tipos", viejas ideas, capaces de configurar un buen sistema de vida, noble, virtuoso, humano y divino a la vez.
No hay nada hay más triste que el  triste espectáculo de los sueños muertos, en aquellos hombres que no supieron proteger ni alimentar sus vástagos anhelos, y faltantes de  espiritualidad. El hombre teme matar hombres, o lo considera un crimen, pero ni siquiera nos preocupamos por la muerte de nuestros sueños, de aquellos que alguna vez nos hemos atrevido a florecer en el corazón, pero que son lentamente aniquilados en nombre de un necio materialismo que, de todas formas, no puede proporcionar ningún alimento eterno.
Este siglo nos  exige hombres fuertes, capaces de soñar, sí, pero también capaces de plasmar sus sueños poniendo en juego lo mejor de nuestra voluntad. Plasmar un sueño no es simplemente imaginarlo: esto otro hay que hacerlo... De modo que terminaremos afirmando que este Ideal que proponemos y queremos para nuestro siglo, para nuestros hombres, es un ideal fuerte para hombres fuertes y capaces.

Ena Bibiana Quintero Sánchez
Comunicación  social
Funlam 

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